Helado de Oreo

Después del buen gusto que nos dejó la publicación del helado garrapiñado, no quería dejar pasar el verano sin ofreceros otra opción para disfrutar de esta gozada. En esta ocasión empleando la misma fórmula que en el helado anterior pero un invitado diferente y muy conocido. Emplearemos galletas Oreo para hacerlo. Os presento esta maravilla: Helado de Oreo.

Como hicimos la vez anterior, en esta ocasión tampoco usaremos muchos ingredientes ni máquinas especiales. Tan solo 3 ingredientes más la estrella invitada: las galletas Oreo. Un helado que os dejará muy fríos pero encantados con su sabor. No podréis dejar de comerlo.

¡Vamos a por él!

Aquí abajo os dejo el vídeo tutorial para que os resulte más fácil realizarlo y no os perdáis ni un paso. Luego, como siempre, os lo dejo por escrito.

Ahora sí, vamos con la receta.

INGREDIENTES

1 rulo de galletas Oreo
200 g de leche condensada
400 g de nata para montar o crema para batir con un mínimo de 35% de materia grasa.
1 cucharada de esencia de vainilla

PASOS

• Introducimos las galletas en un bolsa de cierre hermético reservando 2 para decorar. Con ayuda de un rodillo las troceamos haciendo que queden trozos grandes. Depositamos en un bol y reservamos.
• Procedemos a hacer el helado. En este caso, solo emplearemos nuestro Thermomix para montar la nata. Para ello colocaremos la mariposa en las cuchillas y verteremos la nata bien fría de la nevera. Es importante que esté fría para que monte bien. Pondremos el Thermomix en velocidad 3 sin tiempo controlando a través del bocal cuando la nata forme surcos y esté bien firme. En mi caso fueron dos minutos exactos pero ese depende de la marca de la nata y de su temperatura así que lo mejor es ir controlando que no se nos pase. De lo contrario, tendríamos mantequilla en lugar de helado. 
• Mientras monta la nata mezclaremos la leche condensada con la esencia de vainilla. 
• Una vez tengamos la nata montada tan solo tendremos que integrarla en la mezcla de leche condensada poco a poco y con movimientos envolventes. De esa manera no perderemos el aire de la nata y nos quedará un helado muy cremoso. 
• Por último, incorporaremos la galleta troceada y mezclaremos todo. Tapamos y llevamos al congelador un mínimo de 6 horas.
• Podemos servir con nata montada y trocitos de las galletas reservadas.

¿Qué os ha parecido? Ya veis que no tiene mucha dificultad y que la mayoría de los ingredientes los tenemos por casa. Como siempre os digo, complicaciones las justas. ¡Espero que os haya gustado mucho!

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¡Un saludo a todos, cocinillas!

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