Como receta extra del especial de Semana Santa, hoy os traigo otro dulce muy típico de estas fechas. Se trata de la Leche Frita. Un postre muy fácil de hacer que además está delicioso.
La leche frita es un manjar que se suele consumir en cuaresma al estar elaborado con ingredientes básicos que todos tenemos en casa. La leche, los huevos, el azúcar y la harina son algunos de ellos.
Se prepara como si fuera una bechamel, mezclando los ingredientes hasta formar una masa densa que tendremos que dejar enfriar para poder cortarla y freírla; y posteriormente rebozarla en una mezcla de azúcar y canela como hacemos con las torrijas.
¿La habéis probado? Seguro que sí.
¿Queréis saber cómo se hace?
¡Vamos con la receta!
Vídeo Receta
Como siempre, por aquí abajo os dejo el vídeo tutorial para que veáis lo fácil que es hacer Leche Frita en casa. Más aún si nos ayuda nuestro amigo el Thermomix. Nos llevará tan solo 10 minutos hacer la masa. Os lo cuento todo un poco más abajo.
Visto el vídeo, os dejo con la receta.
Receta
Tiempo Más de 1 hora
Raciones 25-30 unidades
Ingredientes
100 g de harina de maíz
1000 g de leche entera
150 g de azúcar
4 yemas o 3 huevos completos
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 cucharadita de canela en polvo
Para rebozar y freír
2 huevos
100 g de harina de trigo
Abundante aceite de girasol
100 g de azúcar
1 cucharadita de canela molida
Para rebozar y freír
2 huevos
100 g de harina de trigo
Abundante aceite de girasol
100 g de azúcar
1 cucharadita de canela molida
Pasos
- En primer lugar, disolvemos la harina de maíz con un poco del litro de leche que usaremos para hacer la masa. Una vez disuelta, vertemos al vaso el resto de la leche, la harina de maíz disuelta, las yemas, el azúcar, la vainilla y la canela y programamos 9 minutos, temperatura 100º y velocidad 4.
- Mientras, forramos una fuente rectangular con papel film. Vertemos la masa y la extendemos bien con ayuda de una espátula. Cubrimos la masa con más papel film a piel para que no se reseque la superficie y dejamos templar. Una vez tibia, la llevamos a la nevera al menos 5 horas. Yo la dejé de un día para el otro.
- Cuando nuestra masa esté bien durita y compacta, la desmoldamos y retiramos el papel film. Con un cuchillo afilado dividimos la masa en cuadraditos. Dependiendo del tamaño nos saldrán más o menos unidades.
- Ponemos una sartén al fuego con abundante aceite de girasol y lo calentamos a fuego medio alto. Batimos un par de huevos y vamos rebozando las porciones de leche frita en harina y huevo batido. Las freímos hasta que estén doradas y las vamos dejando en una fuente con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
- Una vez lista, rebozamos la leche frita en una mezcla de azúcar y canela molida.
¿A qué es muy fácil de hacer? Me encantan esas recetas en las que metes todo en el vaso del Thermomix y listo. Esta es una de ellas. Solo tendremos que esperar a que enfríe la masa y se quede compacta para poder cortarla, rebozarla y freírla.
Es verdad que esta receta no es precisamente baja en calorías, pero como siempre os digo... en el equilibrio está la clave. Ya nos cuidaremos en futuras recetas. De momento, disfrutemos de este capricho tan delicioso.
¡Espero que os haya gustado mucho la receta y que me digáis qué os ha parecido en los comentarios!
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